XXVII


Ordenemos el caos aparente
Ese Ente al dente universal
Éste orden de la gente de misal
Que creen en la verdad consecuente

¡No!... Todo es decente, vanamente
Del gris creyente con su fe congresal
Del áureo cliente que ve transversal
El pensamiento místico que siente

¡A tomar por culo el verso versal!
Todo el soneto impenitente
Mi puta mente de tinte procesal

Pues por la fosa aséptica nasal
Hay un contundente eco silente
 La fuente de ferviente sed colosal