XXXVI


El cielo es azul, la tierra marrón
Y Los pimientos de Padrón son verdes
Acuérdate si la confianza pierdes
Con la nula esperanza del llorón

Piensa en ese hermano sin zurrón
En ese juicio al ladrón que pierdes
Por ansiar justicia en aguaverdes
Y no ver a un auténtico cabrón

Pues puede que los tinos desacuerdes
Y veas negro lo que es en jirón
Blanco de un santo varón enlerdes

Los chorizos culares que encuerdes
De gruesa tripa que muerdes del tirón
 Son tan sólo el borrón que acuerdes